Advertencia para futuros candidatos
Quien decide ser político debe entender lo siguiente: la política pasa factura tarde o temprano. Hay sacrificios personales y familiares que tal vez no quieras hacer, pero la situación te obligará. Deberás viajar con frecuencia, reunirte hasta tarde, comer en la calle, rodearte de mucha gente, en algunos casos no dormir mucho y, exponerte de esta manera, también podría poner en riesgo tu vida (dependiendo del contexto, no es lo mismo una alcaldía en una zona dominada por la guerrilla, a una en un pueblo costeño tranquilo).
Tales sacrificios son cobrados, para bien o para mal. El tiempo no se devuelve, así ganes en los comicios; familia, amigos y tú mismo te reclamarás atención, pero todo será desplazado por el bien común, por ver materializado el proyecto de un país mejor. No todo el mundo entiende, ni está obligado a entender tu sueño.
Los consultores honestos deben advertir siempre el precio de la política a sus futuros clientes, bien podrían no hacerlo y sin escrúpulo alguno aportar en la separación de una familia, por ejemplo. Al final, el cliente busca asesoría por una razón: que alguien le dé un norte para lograr la victoria en la contienda electoral; por lo que escuchará y hará (en el mejor de los casos) lo que un tercero le diga, pero este tercero no se encargará de reconstruir un hogar a causa de tu ausencia.
¿Qué recomiendo? Reflexione sobre lo que puede o no perder, si es capaz de llevar agenda rigurosa, si tiene apoyo familiar fuerte, si tiene algún problema importante de salud y, por sobre todas las cosas, analice su contexto. Un análisis costo-beneficio es el ideal en casos complejos.
Tome en cuenta que soñar es gratis, pero nunca obtenemos la ganancia al 100% en la materialización. A veces, podemos aportar desde otros espacios para soslayar conflictos graves que pudiéramos haber evitado con decisiones estratégicas oportunas.
@YorbisEP